Los tacones eran cosa de hombres
No son un calzado cómodo ni práctico. Si se llevan muy a menudo pueden ser perjudiciales para la salud de nuestros pies, pero todas las mujeres los usamos: unas para el trabajo y otras sólo en ocasiones especiales. Hablamos de los tacones, un símbolo de feminidad, de glamour incluso ensalzan la figura de la mujer.
Son un bien preciado en la alta costura pero ...¿sabías que los tacones alguna vez fueron un calzado exclusivo de los hombres?
EL ORIGEN DEL TACÓN.
Como hemos dicho, los tacones no son un calzado apropiado para muchas actividades cotidianas como conducir. De hecho, fueron creados para otro tipo de labor.
En el Medio Oriente, los zapatos de tacón fueron usados durante siglos por los jinetes persas. Una buena equitación era esencial en los estilos de combate en Persia, el nombre histórico de Irán. Los soldados tenían que sujetarse a sus estribos para así poder disparar sus flechas más fácilmente. El tacón les ayudaba a sujetarse del caballo y disparaban con más precisión.
Al final del siglo XVI, el Shah Abbas I tenía la caballería más grande del mundo. El monarca deseaba establecer lazos con gobernantes en Europa Occidental con el fin de tener aliados a la hora de enfrentar a su mayor enemigo, el Imperio Otomano. De esta manera, en 1599 Abbas envió su primera misión diplomática a Europa, específicamente a las cortes de Rusia, Noruega, Alemania y España.
EL TACÓN EN EUROPA.
En la Europa Occidental del siglo XVII surgió un interés por todo lo que tenía que ver con Persia. El rey de Francia, Luis XIV, fue el pionero en Europa en llevar tacones. Los zapatos al estilo persa fueron copiados por aristócratas en aras de conseguir una apariencia más viril. De repente, calzar zapatos de tacón significaba que un hombre era muy masculino.
Todas las modas de las clases altas llegan siempre a las más bajas aunque con materiales de peor calidad. Cuando esto ocurrió, Luis XIV firmó un edicto en 1670 donde solo los miembros de su corte podían calzar zapatos con tacones rojos. Pero en la práctica la alta sociedad calzaba zapatos de tacones no autorizados e imitaciones. La aristocracia también respondió aumentando dramáticamente la altura de sus zapatos, con lo que nació entonces el zapato de tacón alto.
Y no sólo impusieron su grandeza con la altura del tacón. Las calles de aquél siglo eran empedradas y llenas de barro por lo que este tipo de zapatos no eran propicios para caminar por allí, aunque esto era realmente lo que buscaban. Una de las mejores maneras de tener estatus social era a través de costumbres imprácticas agregando que la clase alta siempre usó ropa poco práctica, incómoda y lujosa para anunciar su estatus privilegiado.
"No eran la clase trabajadora y no tenían que caminar muy lejos"
Para ser un gran rey, Luis XIV era muy bajo: 1,63 metros de altura. Por ello, mejoraba su altura agregando 10 centímetros con sus zapatos de tacones, muchas veces decorados con escenas de batallas. Los tacones y las suelas siempre eran de color rojo, el teñido era caro y era símbolo de estatus.
La moda rápidamente llegó a la Gran Bretaña y el rey Carlos II de Inglaterra en su coronación en 1661 se le representa calzando un enorme par rojo, con tacones estilo francés pese a que él medía 1,85 metros sin ellos.
TACONES Y MUJERES
Las mujeres siempre hemos ido adoptando elementos del vestuario de los hombres así que el uso de zapatos de tacón se extendió rápidamente entre ellas sobre el año 1630. Y no solo los tacones, también se atrevieron con los sombreros y el pelo corto. La masculinización del vestuario femenino era un hecho por lo que desde ese momento la clase alta europea adoptó una moda de zapatos unisex hasta el final del siglo XVII, cuando las cosas comenzaron a cambiar otra vez.
En ese momento empezó a haber un cambio en los tacones. Los hombres comenzaron a usar tacones más cuadrados, robustos y bajos, mientras que los de las mujeres eran más esbeltos y curvos. La zona de los dedos en los zapatos de las mujeres estaba cubierta en la mayoría de los casos, por lo que cuando aparecían debajo de la falda, los pies se veían más pequeños y delicados.
Años después con el movimiento intelectual de la Ilustración, llegó un nuevo respeto por lo racional y lo utilitario y un énfasis más importante en la educación que en los privilegios. La moda masculina giró hacia una ropa más práctica. En Inglaterra, la aristocracia comenzó a vestir ropa sencilla vinculada al trabajo. Fue el inicio de lo que ha sido denominado como "la Renuncia del Gran Macho", lo que se tradujo en el abandono del uso de joyas, colores brillantes y telas ostentosas. Ahora llegaba una moda de colores oscuros, sobrios y homogéneos.
Las diferencias entre los sexos comenzaron a ser entonces más pronunciadas. Comenzó la discusión sobre cómo los hombres, independientemente de su clase, podían convertirse en ciudadanos a través de la educación. Las mujeres, en cambio, eran vistas como seres más emocionales, sentimentales y poco educadas. El deseo femenino comenzó a construirse en términos de moda irracional y los tacones altos. Los tacones altos pasarían a ser vistos como tontos y afeminados lo que hizo que en 1740 los hombres dejaran de usarlos.
Podemos decir entonces que el siglo XVIII fue un siglo de transición para el calzado masculino.
EL RETORNO DE LOS TACONES
La pornografía hizo que el tacón en la mujer significara un símbolo de erotismo. Pero esto fue sólo 50 años antes de que desaparecieran también de los pies de las mujeres, justo después de la Revolución Francesa. A mitad del siglo XIX, la fotografía comenzó a cambiar la manera en que la moda y la mujer se veía a sí misma. Los que trabajaban en la pornografía fueron los primeros en usar la nueva tecnología, tomando fotos de mujeres desnudas para postales, donde las modelos posaban en posiciones que recordaban a los desnudos clásicos, pero calzando tacones altos de la edad moderna.
Esta asociación con la pornografía convirtió a los tacones altos en accesorios eróticos para las mujeres. En la década de 1960 regresó el tacón bajo en las botas de vaqueros y en los '70 los hombres lucieron zapatos de plataforma.
Lo cierto es que el significado del zapato de tacón se ha desvirtuado a lo largo de los siglos. La moda cambia, pero también es cíclica. Todo pasa y todo vuelve.
Fuente: BBC
